18Julio

El pasado domingo 15 de julio se celebró la IV Jornada Regional de convivencia de jóvenes cazadores

El pasado domingo 15 de julio se celebró la IV Jornada Regional de convivencia de jóvenes cazadores

Con la participación de más de 20 niños y niñas de todas las edades, la FCC llevó a cabo este evento deportivo, en colaboración de la Señorita Luisa Preciados Abelairas, que llevó a cabo una magnífica organización y gestión del mismo.

Los jóvenes participantes, siempre acompañados por un adulto responsable, disfrutaron como nunca de un espléndido día de campo en compañía de familiares y sus amigos los perros de caza. Era digno de ver como los pequeños se comunicaban con los perros animándoles a seguir el rastro o tranquilizándolos hasta recibir la orden de levantar la codorniz.

La jornada comenzó con una demostración de cómo se marca un rastro de jabalí. Los niños disfrutaron con entusiasmo viendo como el jabalí se tumbaba al ser acariciado por su dueño y como obedecía y le seguía, pasando por las marcas previamente colocadas por un juez deportivo de la FCC.

Seguidamente y ya en el puesto de control preparado por la señorita Luisa y todos los demás colaboradores, se explicó a los participantes la importancia y necesidad de la caza para conseguir un equilibrio entre los recursos que proporciona el bosque y lo que necesitan los animales que en él viven. Una población desmesurada de animales sería letal para ellos mismos y para el bosque; los herbívoros comerían los brotes de los árboles nacientes como inteligentemente apuntó un niño y el bosque no se regeneraría, porque como también dijo, los árboles nacen crecen, viven y mueren y precisamente por ello el bosque desaparecería junto con todos sus habitantes y también los jabalís, que aunque comen de todo, al terminarse la comida por ser muchos a comer, morirían de hambre y nos quedaríamos sin jabalíes.

Se hizo hincapié en la educación como un punto importantísimo tanto en competición, porque así lo recoge el reglamento de perros de rastro, como en el día a día cuidando nuestros bosques, porque además de ser la casa de los animales, para nosotros es vital porque ellos nos proporcionan aire puro y limpio, agua de sus manantiales para nuestros ríos, leña para nuestros hogares y bellos paisajes para disfrutar de nuestros momentos de ocio y descanso.

Seguidamente y por esta exposición de realidades quedó claro que cazar no es matar, del mismo modo que jugar al futbol no es marcar goles o practicar ciclismo no es ganar una carrera, sino que tenemos que ver la caza como un deporte sujeto a un reglamento que es la Ley de Vedas para cada temporada y los reglamentos que regulan sus distintas actividades deportivas como San Huberto, Rastro de Jabalí, Rastro de Liebre, etc. que confirman todo lo anteriormente dicho.

A continuación pasamos a los trabajos en campo que fue algo espectacular y emocionante. Pocas veces hemos visto a los niños disfrutar tanto viendo a su amigo el perro animado por su voz, trabajar para seguir el rastro, correr por el campo de forma espectacular buscando la codorniz y quedar inmóvil indicando el lugar donde se encontraba.

También tuvimos una demostración de obediencia y adiestramiento de un precioso perro Boxer Alemán al que los niños y mayores seguían con admiración todas sus actuaciones y que en alguna de ellas participó un niño, finalizando su actuación con aplausos de agradecimiento.

Y llegó el momento del reparto de premios y regalos; para todos hubo comida y bebida y todos participantes y organización recibieron su regalo. Todos los niños recibieron un bonito trofeo, una medalla de competición, un diploma de participación y un árbol autóctono con maceta para plantar.

La Federación Cántabra de Caza trabaja por la promoción del Deporte Cinegético, fomentando la formación y apostando por el relevo generacional de cazadores.

Gracias a Luisa y a todos los colaboradores, al Club Deportivo Básico de Ajo, a los propietarios de los perros de caza mayor y menor, al del jabalí y a todas las firmas comerciales. Francamente era digno de ver y recordar la cara y expresión de los ojos de aquellos niños durante la exhibición pero sobre todo al recibir los regalos.

Publicado en Competición, FC Caza